Páginas

27 jun 2022

Reseña: The Wonder, de Emma Donoghue

Emma Donoghue, The Wonder (Londres: Pan Macmillan, 2016). 291 páginas.

Pocos años después de la Gran Hambruna Irlandesa (desde 1845 a 1849), una niña de un pueblecito del interior de Irlanda, Anna, dice estar sobreviviendo durante semanas sin comer nada, que subsiste gracias al maná celestial que le llega del cielo. El fenómeno rápidamente cobra notoriedad. Al poco tiempo, empieza el turismo religioso; su propia familia cree que la niña va camino de la santidad. Entre el médico local, el párroco y otros notables de las cercanías organizan su vigilancia las veinticuatro horas del día para cerciorarse de que no haya engaño alguno. Para ello, contratan a una monja y a Elizabeth Wright, enfermera inglesa curtida en la Guerra de Crimea y alumna aventajada de Florence Nightingale.

¿Es todo un montaje? Para Lib Wright, Anna posee una fuerza de voluntad a prueba de bomba. La exhaustiva búsqueda de alimentos no arroja resultados. Con el paso de los días, el deterioro físico de Anna empieza a ser evidente: se le hinchan las extremidades, se le cae el pelo. ¿Qué poderosa razón ha llevado a Anna a la determinación del ayuno absoluto? ¿Es la autoridad de la Iglesia la que está detrás de todo?

Aunque parece que la narración no avance todo lo rápido que el lector quizás querría, hay un motivo evidente. Han de transcurrir las dos semanas de la vigilancia hasta que se produzca un desenlace. Y cuando éste ocurre, la novela rinde.

El dato histórico revelador es el hecho de que en esa Irlanda rural, cerca de cincuenta casos de niñas en ayuno ocurrieron entre los siglos XVI y XX. En el caso de Anna, la niña afirma (con el beneplácito del párroco local) que el maná celestial la mantiene. De las conversaciones que mantiene con la niña, la enfermera empieza a desenredar la madeja: el objetivo de Anna es salvar el alma de su hermano, que murió un año antes. La niña cree a pie juntillas que con su ayuno y sus rezos conseguirá que su hermano vaya al cielo.

La turba es elemento energético esencial en el interior de Irlanda. Una pila de turba cortada en Connemara. Fotografía de Chris N. Illingworth.
Donoghue confronta esa disposición científica y recelosa de la enfermera directamente con la religiosidad y el carácter folclórico de la población rural del interior de Irlanda. Una vez más, la creencia ciega en lo que un viejo sacerdote diga puede llevar a una niña a la muerte. ¿Podrá salvarla Lib Wright?

Como novela histórica, The Wonder ofrece a quien la lea la posibilidad de conocer perspectivas que hoy en día nos parecerían absurdas e inaceptables. La trama está bien resuelta y eso importa. O eso creo.

The Wonder se publicó en 2019 en Ediciones B (El prodigio) en traducción a cargo de Paula Vicens Martorell.

13 jun 2022

Reseña: Weather, de Jenny Offill

Jenny Offill, Weather (Londres: Granta, 2020). 207 páginas.
Quién iba a decirnos que la irrupción de Trump en la Casa Blanca habría de dar lugar a narraciones tan imbuidas de pesimismo como esta singular novela de Jenny Offill. Weather está ambientada en el escenario semi-apocalíptico de hace unos años, en el que el cambio climático mostraba su patita de lobo por debajo de la puerta mientras un neurótico, ensimismado en el poder de su propio reality show, se dedicaba a socavar los cimientos hasta entonces sólidos de la sociedad estadounidense y condenaba a una gran mayoría silenciosa al precariado económico, sanitario y vital, cuando no a la miseria absoluta.

La narradora de Weather es Lizzie, una mujer de mediana edad que asume que la actitud de desventura y desesperación ante la que se les avecina es inevitable. Trabaja de bibliotecaria en una universidad, tiene un marido paciente y comprensivo y un hijo que parece desconfiar de todo; además, hay un hermano que está tratando de superar la adicción a sustancias no especificadas. Lizzie, además, colabora con una amiga que publica a través de un podcast recomendaciones para sobrevivir el final de los tiempos.

La novela está montada a base de fragmentos, breves vendavales narrativos, a veces poéticos, a veces mundanos. Es como la vida cotidiana misma, ¿no? A lo largo de las veinticuatro horas del día nunca hay tantos momentos que nos resulten extraordinarios ni inolvidables. El libro consta de doscientas páginas en las que el tono predominante es el de la premonición del desastre que nunca llega. Una llovizna pertinaz de desesperanza aderezada de pequeñas revelaciones o epifanías cotidianas que le dan el impulso necesario para afrontar un nuevo día.

Como contrapunto, en Weather encuentras pequeñas gemas de ironía, retazos de sol y humor en mitad de la borrasca. La mayoría de las ocasiones son las respuestas que Lizzie confecciona a las preguntas de los oyentes del podcast, que en el libro vienen maquetadas en recuadros:


Pregunta: ¿Cuál es la filosofía del capitalismo tardío?
Respuesta: Dos senderistas avistan un oso hambriento en medio de la senda que tienen por delante. Uno de ellos saca las zapatillas de correr de la mochila y se las pone. «No podrás correr más rápido que el oso,» susurra el otro. «Solamente me hace falta correr más rápido que tú,» le responde.
(p. 44, mi traducción)

Fotografía de Jean, de Shelbyville


En realidad no hay consuelo en ningún momento: la sensación de inminente catástrofe medioambiental y la irrupción del fascismo pro-trumpista anegan la narrativa. El matiz imperante es el temor a que todo lo malo llegue a ocurrir, pero el deseo de seguir adelante con la vida siempre está debajo, no totalmente oculto.

Weather se publicó en castellano como Clima, en traducción de Eduardo Jordá (Libros del Asteroide, 2020); i en català, amb el títol de Com el temps, amb traducció de Yannick Garcia (Amsterdam, 2020).